Seguramente
muchos de los que leyeron el título de este escrito pensaron en ese momento
especial en que las almas enamoradas se entregan al amor y ocurre una llamarada
de pasión. Sin duda alguna ese momento
es uno bien importante en la vida de cada ser humano pero esta vez el título lo
quise llevar a un nivel más profundo: ¿Se
han puesto a pensar en cómo verdaderamente se hace el amor?
Hacer el
amor no es simplemente entregarse en cuerpo y alma es saber mantener vivo el
amor a pesar de las tormentas que puedan surgir a lo largo del camino. Hacer el amor no es una tarea fácil pues en
la marcha van surgiendo muchos cambios y hay que ajustarse a cada uno de ellos. Para que todo funcione es primordial estar
profundamente enamorado de la persona que tenemos frente a nosotros sino no nos
sirve de nada el permanecer al lado de él/ella.
Hacer el amor requiere de una receta de compromiso total desde ese
primer día en que se dijo Sí al amor. Es
tomarle mucha importancia a la persona y también a todos los aspectos de la
relación. Hacer el amor es amar a ese
ser especial no sólo en el día de hoy sino también mañana y hasta el fin de
nuestros días.
Cada día
Dios nos da la oportunidad de hacer el amor de la manera más original posible
con el propósito de que el mismo no muera de desolación o que por culpa de la
rutina desaparezca. Debemos mantener a
nuestra pareja enamorada como si fuera la primera vez que se dijeron un
hola. La semilla del amor que sembramos
ese primer día debemos darle todo el cuidado que se merece para que así pueda
florecer una y mil veces. Mientras
hacemos el amor pueden pasar un montón de sucesos pues a veces no todo saldrá
como esperábamos pero cada día tenemos la oportunidad de enmendar nuestras
acciones que demuestren que amamos a nuestra alma gemela sobre todas las cosas.
Hacer el
amor es estar siempre pendiente a nuestra pareja. Es conocer sus necesidades y aportar en lo
que se pueda para que no le falte nada en ningún instante. Es brindarle siempre todo nuestro cariño y
tratarlo/a como se merece. Es
comprenderle en todo momento y a pesar de que no siempre tenga la razón
respetar su manera de pensar. Hacer el
amor es estar junto a él/ella en todo momento aun cuando el cielo se ponga color
gris. Hacer el amor se basa siempre en
amar, reír, llorar, mantener el respeto y la honestidad en alto y simplemente
vivir intensamente el momento, lo demás vendrá por añadidura.
Hacer el
amor es lo más maravilloso que nos puede pasar en la vida. Disfrutemos de cada etapa y hagamos el amor
de manera mágica e inolvidable.