"La clave de la felicidad es que te vivas cada día al máximo y alrededor de las personas que amas." ysm

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viernes, 22 de enero de 2016

La sonrisa de un niño

La felicidad sin duda alguna es uno de los sentimientos que más me vivo pues el ambiente está rodeado de ello y también llena nuestro corazón de mucho amor.  Debe ser siempre uno de nuestros propósitos de vida primordiales pues todos vinimos a este mundo a ser felices independientemente de las adversidades que sucedan a través del caminar.  No hay nada más hermoso que sonreír con el alma entera y más aún cuando ves que quien da esa sonrisa es un niño.  Ver a un niño feliz debe ser el motivo principal no sólo de los padres y/o familiares sino también de todas las personas que tenemos contacto con ellos.

La sonrisa de un niño es un faro de luz que engalana nuestros alrededores para iluminarlos con su gran esplendor.  Cuando estamos al lado de ellos no hay ambiente de tristeza ni preocupaciones pues ellos mismos se encargan de provocarte aunque sea una sonrisa.  No sé cómo lo hacen pero ellos iluminan nuestro mundo en un abrir y cerrar de ojos.  Los niños son los motivadores número uno para cualquier momento difícil que estemos pasando y mediante su mirada nos hacen ver que todo es posible si así uno lo cree.  Su sonrisa a primera instancia realmente enamora y contagia cualquiera a su paso.  Me encanta verlos sonreír porque lo hacen de una manera asombrosa y única.  Si es hermoso cuando ellos sonríen más bonito es cuando nosotros los adultos somos los causantes de su alegría.

No permitamos que un niño llore al menos que sea de grata felicidad.  Ellos siempre se merecen lo mejor:  paz, tranquilidad, amor y mucha felicidad.  Dejemos que sonrían con esa naturalidad con que lo hacen.  Que sean felices con su gran imaginación, sus interesantes locuras y hermosa inocencia que los caracterizan.  Que la sonrisa de un niño siempre sea nuestro aliento en momentos de debilidad, nos permita dejar vivos a ese niño/a en nuestro interior y que sea en todo momento uno de nuestros propósitos de vida con el fin de dejarles un mundo mejor en el futuro.

viernes, 1 de enero de 2016

Año Nuevo, Nueva Yo

El 2016 ya llegó en un abrir y cerrar de ojos y eso quiere decir que comenzó un nuevo año, un nuevo libro tenemos en nuestras manos para empezarlo a llenar y a su vez nuevas aventuras nos esperan a lo largo del caminar.

Antes de comenzar a aventurarnos debemos sentarnos a reflexionar, es decir, tener ese encuentro con nosotros mismos.  El 2016 debe ser iniciado con un agradecimiento único pues no todos tuvieron la dicha de abrir los ojos un año más.  Es una bendición estar vivos y más aún cuando estamos rodeados de las personas que amamos mucho.  Tenemos en nuestras manos un nuevo año en el cual se nos da la oportunidad de cumplir con los propósitos de Dios más los planes que tenemos en mente.  Es momento de volar muy alto pero sobretodo, de seguir una regla importante:  el ser felices sin límites.  Aprovechemos el tiempo para cumplir todos esos sueños o planes que no hicimos realidad en el 2015.  Busquemos la manera de ser mejores seres humanos y de corregir nuestros errores.  Que el 2016 sea ese año que tanto estabas esperando.

Año Nuevo, Nueva Yo pues este es el momento de mi renacer.  La Yahaira que estaba en el 2015 ya comienza a hacer su transformación porque es tiempo de dejar atrás lo que no me ayuda a progresar.  Dejo espacio disponible para todo lo que venga y confío en que será de gran bendición para mí y los míos.  Estoy llena de gran energía para dar muchos pasos en esta travesía llamada vida.  Sé que me esperan grandes retos que me pondrán a prueba a cada instante pero sé que la perseverancia junto a todo lo positivo serán mi fortaleza para continuar hacia adelante.  Los malos momentos serán parte del caminar pero sé que los buenos harán el balance perfecto y claro está, son los que prevalecerán en mi mente y corazón.  Estoy lista para afrontar todo lo que venga pues la bendición de Dios está presente en mí y su presencia siempre camina a mi lado para jamás dejarme caer.

Declara desde hoy que el 2016 será Tu Año, el mejor de todos.  Pon a Dios en todo lo que hagas y todo obrará para bien aunque el mundo diga lo contrario.  ¡Bienvenido 2016!