No importa
si es de día o de noche pero esta hora en particular siempre da de qué hablar….a
veces estamos hasta ansiosos porque llegue este momento....cada vez que el
reloj marca las 11:11 nos dicen que debemos pedir un deseo tal y como lo
hacemos cuando vemos pasar una estrella fugaz….no tenemos conocimiento si estos
deseos se hacen realidad, pero de igual forma nos arriesgamos a pedirlo….
Hay que tener
en cuenta lo que deseamos....tengamos precaución con lo que se pide porque el
mismo puede convertirse en una realidad maravillosa o simplemente ser un
momento incómodo e inminente. También
debemos ser capaces de entender cuando un deseo no se cumple. Este minuto que pasa a diario dos veces al
día no nos puede garantizar que nuestro deseo se hará realidad, es por eso que
no debemos tampoco aferrarnos a este método....aprendamos a ser realistas y
también a poner de nuestra parte para hacer realidad nuestras peticiones....
¿Y cómo nos
sentimos cuando se hace realidad nuestro deseo?
En definitiva si se cumple eso que tanto anhelamos sentimos una gran
bendición. Un momento que solo se
describe con una sonrisa en nuestro rostro y el deseo revelado ante nuestros
ojos. Nunca dejamos de lado esta ilusión
porque una vez se cumple no dejamos de creer.
¡La clave está en arriesgarse a CREER!
Cuando se pide con el corazón puede darse la posibilidad de hacer
realidad ese deseo....
Para
finalizar, les digo a los que como yo creemos en el poder que tiene las 11:11
que pidan con consciencia, que seamos pacientes y si el deseo no se da como
esperamos pues que busquemos medidas alternas para hacer realidad eso que tanto
deseamos....nunca desistamos de soñar y desear porque todo en su momento
llegará....
¿11:11 qué te pediré hoy?
No hay comentarios:
Publicar un comentario