Visualización

Por un momento cierro mis ojos y me transporto a este único lugar en donde la vista es espectacular.  Parece un sueño...un hermoso paraíso del cual no quiero salir nunca.  Se puede reflejar un maravilloso paisaje que alimenta mi vista.  El sol está iluminando mi yo interno.  Las nubes lo rodean sin tapar la hermosa luz que transmite.  Puedo sentir la brisa fresca acariciando mi piel.  Puedo escuchar el sonido del mar que va acercándose y alejándose.  Puedo apreciar unas hermosas montañas que me ayudan a entender que para lograr el éxito debemos siempre mirar hacia la cima y a que no debemos rendirnos en el intento.  Me siento a la orilla de este hermoso lugar y el agua fría roza ligeramente mis pies.  Contemplo el paisaje por un rato y siento cómo mis cargas negativas se van alejando con el oleaje del mar.  Noto que mi cuerpo se está liberando de la tensión que tenía antes.  Inhalo y exhalo profundamente al compás del vaivén de las olas del mar.  Puedo respirar un aire de paz y armonía.

En un momento dado siento una ligera preocupación dentro de mi corazón.  Comienzo a llorar sutilmente para dejar salir todo sentimiento que interrumpe mi paz.  Pasan los minutos y veo como las lágrimas se van borrando de mi rostro.  Veo que mi luz interior se cansó de llorar y decidió brillar lo más fuerte posible.  Me levanto del suelo, cierro los ojos y abro mis brazos hacia los lados en señal de fortalecimiento.  Sigo inhalando y exhalando profundamente de manera tal que pueda volver al estado de relajación en que estaba antes.  El hermoso paisaje me ayuda a que pueda estar bien en menos tiempo.  Definitivamente hay que estar allí para poder apreciar lo que estoy visualizando.

Al abrir mis ojos me encuentro con la realidad.  Me doy cuenta que solo fue una visualización del lugar donde me gustaría estar en estos momentos.  Imaginé una escena en la cual relaté una historia jamás contada y que quizás podría hacerse realidad si el lugar existe.  Utilicé mi creatividad para contar un evento que me ayudó a salirme de la rutina diaria.  Inventé este suceso para relajarme y recibir paz mental.  Fue una nueva aventura sin haberla vivido…una aventura que me llevó a salirme de los límites establecidos.  ¿Qué fue lo más fantástico de esta aventura?  Pude ver de repente un cambio en mi yo interno que jamás había visto.  Ese cambio fue que pude ser completamente libre para expresar todos mis sentimientos y preocupaciones.  La visualización es una técnica que se puede utilizar para conseguir un estado de tranquilidad mental.  Además ayuda a que pienses en eventos positivos que te beneficiarán en tu vida.

Nunca limites tu imaginación.  Déjala correr a su ritmo y utiliza todo lo que esté a tu alcance para que la visualización sea efectiva.  Ilusiónate sólo de aquellas escenas que sí puedes convertir en realidad sin pensarlo dos veces.  Vive tranquilo/a pensando en todos los eventos positivos que han sucedido y los que han de suceder.  De esta forma conservarás una conciencia más saludable y serena.  Esta aventura llamada vida no es nada fácil ya que los problemas siempre darán mucho de qué hablar.  Utiliza esta técnica de relajación para minimizar los efectos negativos de toda situación o evento estresante.  Al final recibirás una gran satisfacción que nadie te podrá quitar.  Recuerda que la clave está en controlar los pensamientos que llevas dentro de tu mente.  Minimiza los negativos y has que los positivos marquen tu caminar.  Inventa tu propia historia y disfrútala mientras la vas creando.  Como punto final digo lo siguiente:  imagina, visualiza, libérate y vive.

* Inspiración tomada de la hermosa pintura que se encuentra en la parte superior de este escrito.

Tranquilidad dentro de toda tempestad

En un momento de la tarde me acuesto en la cama para meditar.  Inhalo y exhalo profundamente para encontrar la relajación perfecta.  Me pongo a pensar en todo lo que hice en el día y me doy cuenta de que el ambiente está bastante tranquilo y no como en otras ocasiones que ha estado sobrecargado por las preocupaciones.  Sé que todo está en calma porque no me preocupo tanto por mis problemas, estoy consciente de que existen pero no dejo que arruinen lo positivo que ocurrió en el día.  Puedo respirar despacio y relajadamente como si los problemas no existieran.  Siento el cálido abrazo del amor, la felicidad y las bendiciones.  Puedo imaginar todo tipo de escenas positivas sin sentirme culpable de que puedan hacerse realidad.  Consigo dormir sin preocupaciones y teniendo en mente que cada día puede ser mejor si lo creemos posible.  Me levanto con más ganas de triunfar y de ser feliz sin importar las tempestades que vengan.

Lo mencionado en el primer párrafo es señal de que encontramos la tranquilidad dentro de toda tempestad.  Cuando notamos que el ambiente está calmado es indicio de que estamos en paz con el mundo.  Cuando sentimos nuestros latidos del corazón en calma es sinónimo de que tenemos tranquilidad con nuestro yo interno.  Y es que la tranquilidad es algo que nos relaja aunque haya problemas en nuestras vidas.  Pueden suceder muchos sucesos que nos preocupen pero cuando sentimos esa tranquilidad a nuestro alrededor podemos respirar una gran armonía que puede contagiar a otros.  Mientras estemos en paz con todos no hay persona o evento que pueda arruinar nuestra calma.  No importa cuantos problemas tengamos, busquemos todo lo que nos ayuda a estar bien y usémoslo para nuestro beneficio.  La tranquilidad es buen alimento para un estilo de vida mejor.

Demostrar con acciones

La vida es impredecible de diferentes maneras.  En este caso me refiero en que a veces en quien uno más piensa es la persona que menos nos demuestra lo mucho que nos quiere y en quien menos uno imagina es quien nos muestra con acciones lo importante que somos en su vida.  No nos confiemos por todo lo que nos dicen sino que veamos que esas palabras se cumplen en la realidad.  Si hacemos un pacto con las personas es para no romperlo sino:  ¿Para qué los hacemos si vamos a fallarles?  Quien falla en sus promesas no está totalmente seguro de su vida.  No llenemos de falsas ilusiones a las personas cuando sabemos que ellos tienen las de perder.  Hagamos promesas que estaremos seguros de cumplir para no romperle el corazón a la otra persona.  Si somos honestos debemos demostrar con acciones que así mismo es.  Las palabras no son suficientes para mostrar que pueden confiar en nosotros.  Las acciones van de la mano con lo que se dice.

Demostrar con acciones es expresar más allá de las palabras que haremos todo lo posible por cumplir con lo prometido.  Es dar la milla extra por esa persona a la cual le prometimos algo.  Esa persona espera de nosotros lo mismo que esperaríamos de él/ella.  Si le decimos a alguien te quiero mucho que sea porque de verdad lo sentimos y por supuesto, demostremos con acciones que esas palabras son dichas con la más absoluta sinceridad.  Que el mundo vea que somos personas enteramente confiables y que no hacemos promesas en vano.  Las personas no saben el daño que hacen cuando no cumplen con su promesa:  es una herida que tardará en sanar.  Quizás la persona se dé cuenta en que hizo mal y luego cumpla pero puede pasar de que ya no vuelva a ser parte de tu felicidad.  Si al final de toda la historia esa persona no cumple con lo prometido debemos alejarla de nuestras vidas porque por más que diga que va a cumplir siempre va a haber un momento en que volverá a fallarnos.  Dejemos que el destino decida quien entra y sale de nuestras vidas pero también dejemos asegurados a los que sí demuestran que nos quieren mucho.

Se han olvidado de mí

Mirada triste y perdida.  La sonrisa se ha ido para no volver.  Suspiros de dolor quebrantan a mi corazón.  Estoy haciéndome de cuenta que no pasa nada aunque esté destrozada por dentro.  Ya no razono como antes; soy irreconocible.  Ya no le encuentro el mismo sentido a la vida.

Allí estoy sentada en el rincón de siempre pero nadie me ve.  Es como si fuera invisible aún siendo visible para todos.  Es un mundo del cual no he sido bienvenida:  un mundo que está fuera de mi realidad.  En este rincón me estoy cayendo en pedazos y nadie se fija que estoy desapareciendo.  Hay unos pocos que llegan a verme pero se quedan lejos de donde estoy.  Me miran como si fuera una persona extraña y llena de malos sentimientos.  Cada mirada negativa me clava dolor en mi corazón.  Qué muchas personas han pasado por mi vida….a veces me pregunto:  ¿Quiénes se acuerdan que les ayudé o que fui una gran amiga?  La respuesta es sencilla:  nadie.  Las personas ya olvidaron lo que es el compañerismo y optan por el interés.  En todo lo que sucede termino siendo la que tiene la culpa.  Mis explicaciones no valen nada para el que las escucha.  Si hago las cosas bien no hay quien me mire pero si me porto mal allí veo las miradas juzgándome por mi comportamiento.  Siento un total vacío que nadie puede llenar.  Ya veo que soy poco agradable para la gente que pasa por mi lado.  Yo hago mi parte de ser sencilla y aunque sea como soy tengo buenos sentimientos.  Soy un ser humano como cualquier otro, que comete errores y busca dejar un lindo recuerdo en el mundo.  Es una lástima que todo lo que demuestro no lo logren ver de la misma manera que yo lo veo.  ¿De qué vale que haga esfuerzos para sobresalir si ni tan siquiera notan que estoy aquí?

Ya me cansé de ser parte del mundo.  Seguiré caminando por el valle invisible.  Seguiré abrazando las sombras de la soledad.  Al fin y al cabo nadie se dará cuenta de que me fui.  Me tocará ser "feliz" así porque no veo forma de que pueda pertenecer al mundo de ellos.  Viviré mi propia fantasía aunque me mate por dentro.  Cuando quieran saber de mí ya estaré lejos de su mundo.

Amigos convertidos en extraños y conocidos que forman parte de nuestra vida

Los tiempos cambian y las personas también.  Quienes uno imaginaba que eran nuestros amigos se convirtieron en extraños y quienes uno jamás pensaría se convirtieron en las personas que más amamos en nuestra vida.  Así es esta aventura llamada vida, todo tiene un principio espectacular, un contenido variante y un final que puede alegrar o entristecer.  Son etapas que todos tenemos que pasar:  unas están llenas de mucha felicidad y otras de sufrimiento y soledad.  Es lamentable que una amistad se termine y más aún si no sabemos el porqué de ese final inesperado.  Contaré la historia desde mi punto de vista.

Amigos convertidos en extraños

Son personas que cuando las vemos de primera instancia pensamos que son lo máximo y que jamás se acabará la amistad.  Le dedicamos todo el tiempo del mundo y nos sentimos en mayor confianza con el/ella.  Imaginamos que la amistad será de toda la vida porque todo nos une.  Por circunstancias de la vida suceden eventos que nos terminan separando.  Sea cual sea el evento nos distanciamos y no se ve interés por resolver el asunto.  En nuestros momentos de soledad pensamos muchas cosas:  ¿En qué fallé? ¿Por qué me dejó de hablar? ¿Por qué me pasa esto a mí?  Los eventos o sucesos que nos afectan perjudicaron nuestra amistad y lo peor de todo es que en algunos casos termina todo en resentimiento y logramos hacernos demasiado daño.  Qué triste es que después de una gran amistad todo termine mal y nos convirtamos en extraños de la noche a la mañana.

Conocidos que forman parte de nuestra vida

Son personas que jamás imaginamos que dejarán una huella en nuestras vidas.  Hablamos con ellos por cordialidad pero no sentimos esa confianza de contarles todo lo que nos sucede.  Pasa el tiempo y esas personas van entrando mucho más fuerte en nuestras vidas.  Ya nos sentimos más a gusto cuando nos hablan y hasta intercambiamos más palabras que antes.  Ellos nos aconsejan con mensajes profundos que nos llegan al corazón.  En mi opinión personal me pongo a pensar:  ¿Por qué me ayuda tanto si apenas lo/la conozco?  Con el paso del tiempo estos conocidos se convierten en amigos gracias a la confianza, el respaldo y el afecto que les brindamos.  Gracias a ellos aprendemos lecciones, crecemos como seres humanos y lo más importante, los debemos mantener cerca de nosotros.  Son personas dispuestas a mantener una bonita amistad con nosotros.  No les importa que la distancia esté de por medio porque buscan la forma de saber de nosotros.  Hasta con un simple saludo nos hacen felices.  Vale la pena tener conocidos así.

- Como punto final de esta historia les quiero decir lo siguiente:  no desatiendan a sus amistades pero tampoco se aferren a que son las únicas.  El mundo está lleno de personas maravillosas que les gustaría ser parte de nuestra historia.  Dejemos que todo tipo de personas entren y salgan de nuestras vidas.  Los que verdaderamente nos quieren siempre estarán allí aunque pensemos lo contrario.  Es posible que a muchos no les agrademos y nos terminen alejando de sus vidas pero siempre debemos recordar que aunque sea somos importantes para alguien.

Cuando se quiere ser feliz y no se puede

No todo en esta vida es color de rosa.  Hay momentos en que queremos ser completamente felices pero siempre hay alguna situación que nos impide tener ese estado de eterna alegría.  Podemos estar felices por fuera pero eso no garantiza que por dentro lo estamos.  Es aún más difícil cuando deseamos con todo el corazón ser felices pero el destino nos pone pruebas para ver si logramos vencerlas.  Siempre hay momentos en los que buscaremos rendirnos pero esta debería ser la última opción en nuestra lista.  Si queremos ser felices la vida eterna debemos hacer lo siguiente:

- Debemos desear con todas nuestras fuerzas ser felices.  Si solamente lo pensamos no estamos diciendo nada.  En cambio, cuando ponemos juntos nuestra mente y corazón allí sí podemos decir que lo estamos deseando con todas las fuerzas de nuestro ser.

- Debemos buscar esas fuentes que nos llevarán a esa felicidad anhelada.  Hay muchas maneras de ser feliz aunque no lo imaginemos:  desde las metas que nos trazamos hasta las personas que se cruzan en nuestro caminar.  Busquemos todas esas alternativas y pongámoslas en práctica para que podamos estar bien emocionalmente y llegar a ese estado de ánimo pleno.

- Debemos ser pacientes sobre todas las cosas.  Los problemas no dejarán de ser problemas hasta que tú decidas resolverlos.  Los problemas siempre existirán para hacernos la vida imposible pero está en nosotros en dejar que nos dominen o confiar en que podemos salir airosos de ellos.  Seamos pacientes al esperar nuestra recompensa.

- Podemos tomar la decisión de arriesgarnos a ser felices sin importar las consecuencias.  Nadie dijo que la vida sería fácil pero si la oportunidad que se nos presenta amerita el tomar riesgos pues no debemos dejarlo pasar por alto.

- No perdamos la actitud positiva que llevamos dentro.  Todo está en intentarlo….pueden pasar una de dos cosas:  que salgamos victoriosos o que fracasemos en el intento.

Tengamos en cuenta que quizás estos pasos no resulten.  En algún momento de la vida se tiene que perder porque de todo lo negativo aprendemos a crecer.  A veces tenemos que sacrificar lo que más queremos por el simple hecho de que no se podrá realizar.  No nos desanimemos si no podemos ser felices porque nuestra historia no será así de por vida.  Quizás eso que tanto anhelas no se ha dado porque no es la recompensa adecuada para ti.  Debemos de ser pacientes y darle tiempo al tiempo.  Todo llega en su debido tiempo solo es cuestión de esperar tranquilamente ese momento sin presionarlo tanto.  No nos subestimemos, busquemos la oportunidad perfecta para ser feliz y si vemos que no se puede debemos esperar un poco más.

Nota:  Los pasos pueden variar según el caso de cada persona

Retirarse antes de tiempo

A veces es mejor retirarse de la batalla sin haber ganado.  ¿Para qué seguir luchando por algo que es realmente imposible?  ¿Para que voy a seguirte si ya no eres la misma persona que yo conocí?  Si no hubieses cambiado yo lo daría todo por ti porque con simplemente ser tu mismo(a) valía la pena el sacrificio pero ya perdí las esperanzas contigo.  Es una pena que tenga que tomar esta decisión pero el tiempo y tu indiferencia me hicieron ver la realidad.  Para que nadie más salga herido es mejor dejar las cosas así y que el tiempo decida si podemos volver a vernos.

¿Por qué me retiro antes de tiempo?  Porque ya me cansé de estar detrás de ti y no recibir ninguna señal de tu parte.  Me cansé del silencio e indiferencia que me han hecho pensar que ya no soy importante.  Me cansé de siempre ser la que salga herida de cada problema que tenemos.  Prefiero decir que fuiste una buena persona que me enseñó mucho que odiarte con todas mis fuerzas.  Prefiero sufrir unos días que estarlo toda una vida.  Prefiero recordarte por los buenos momentos que por los malos.  Prefiero seguir mi camino aunque eso signifique que desde hoy todo será distinto.  Prefiero cerrar esta etapa que dejar un capítulo inconcluso.

Ahora me toca la peor parte:  el poder vivir mi vida sin saber de ti.  Será un proceso difícil de enfrentar pero el tiempo me ayudará a sanar heridas.  Quizás en este instante ni estarás pensando que algo me sucede pero si ves que ya ni te escribo y no te busco no es porque no me importas sino que me he distanciado un poco para que puedas continuar tu camino.  A pesar del daño que me has causado y del muro que he puesto hacia ti no te tengo rencor.  No juzgaré las razones de tu silencio…solo deseo lo mejor para ambos.  Le daré el tiempo al tiempo…si el destino quiere que nos encontremos así será.

No puedo terminar este escrito sin agradecerte por ser alguien influyente en mi vida.  Aprendí mucho de los bonitos recuerdos, me reí con las aventuras que vivimos y me enseñaste a vivir sin prisa un día a la vez.  Ahora es el momento de despedirme:  no te diré un adiós sino un hasta luego porque nunca se sabe cuando el destino nos pondrá la oportunidad de estar frente a frente.

La vida es una aventura

La vida es una aventura en la que todos debemos montarnos y recorrerla a nuestro antojo.  Nuestro propósito es vivir la vida al máximo, disfrutar de cada momento de felicidad, ir aprendiendo grandes lecciones y también creciendo en todas las áreas existentes.  Cada paso que damos es un avance para llegar a donde nosotros queremos ir.  Van a haber momentos en los que nos desviaremos del camino debido a los problemas y errores cometidos pero tan pronto los resolvamos volveremos de vuelta a la carretera.  Los obstáculos nos interrumpirán la marcha pero como todo valiente debemos quitar ese problema y seguir recorriendo nuestro largo camino.  Nos podemos detener para pensar las cosas y tomar la mejor decisión para poder seguir con nuestro caminar.  Subir la cuesta es el equivalente de esforzarse al máximo para lograr todas nuestras metas.  Subirla será difícil pero cuando lleguemos a la cima veremos que valió la pena los sacrificios para luego ver la hermosa vista del éxito.

Cada historia es única, con eventos maravillosos e inexplicables y con muchos personajes entrando y saliendo.  Cada evento le da sentido a nuestra vida.  Cada suceso inexplicable le da un toque de misterio a nuestro caminar.  Cada personaje da su participación en el momento indicado y marcará para siempre nuestro recorrido.  También, no olvidemos poner en marcha todos los sentimientos existentes para que el recorrido sea inolvidable.  El camino de la vida se goza mejor cuando vamos en gran compañía y cuando deseamos seguir vivos para disfrutarlo como se debe.  Vivamos la vida paso a paso, no nos apresuremos en el trayecto porque podríamos perdernos parte de ese recorrido.  Disfrutemos del gran paisaje y de todo lo que se nos presente.  La aventura es el elemento clave para que la vida sea más interesante.  Tomemos riesgos, no perdemos nada con intentarlo.  Exploremos todo lo que está a nuestro alcance, gocemos cada momento sin dejar de ser nosotros mismos, tomemos el riesgo de reír y llorar, amemos cada etapa de nuestra vida y vivamos como si no hubiera mañana.