Hay
momentos en la vida en que las cosas no salen como esperábamos y es necesario
tomar decisiones drásticas que cambiarán el rumbo de nuestra historia para
siempre. En este caso el amor es el
protagonista y la consecuencia del mismo es que se pierda de un solo
cantazo. Cuando ya no hay amor o el
mismo ya no es igual es primordial tomar la decisión de quedarse o irse. A continuación la historia....
Este amor
me ha traído muchas satisfacciones, aventuras que me he gozado al máximo pero
tengo que reconocer que cuando las cosas no están para uno no están. Cada recuerdo sigue persistente en mi mente y
me eriza la piel cada vez que lo logro visualizar. Así como han sucedido instantes memorables
tengo que admitir que han ocurrido muchos tropiezos que me han hecho meditar
bien nuestra situación actual. Son obstáculos
que sobrepasan los momentos de felicidad vividos y que sin darnos cuenta han
provocado que el amor vaya muriendo lentamente.
Luego de tanto pensar he tomado una decisión que entiendo es la mejor para
ambos....
Amor, hoy
te tengo que decir que: Renuncio a
ti....renuncio a tu amor porque entiendo que se ha hecho hasta lo imposible para
que el amor continúe fluyendo pero ya el destino escribió su sentencia y esa es
la que estás viendo en estos momentos. El
amor se ha ido desvaneciendo a medida que pasa el tiempo y ya no hay manera de
que vuelva a la vida. Reconozcamos que
estamos viviendo una farsa que ya no tiene cómo sostenerse. Ya no hay vuelta de hoja, la decisión está
tomada y espero que la puedas entender y respetar. Esto no es fácil de asimilar pero: ¿Para qué continuar en una relación en la cual
el amor pasó a un segundo plano? Si nos
quedamos juntos nos terminaríamos haciendo más daño del ya existente. Si cada cual sigue camino logrando renunciar
por completo al otro entonces estaremos bien:
sobretodo, libres y llenos de paz.
Para estar sufriendo todo el tiempo es mejor decir Adiós y cada cual le
dé un giro distinto a su vida....
No me quejo
de tu amor porque mientras estuvo vivo me sentí plena y amada. Lo que me resta por decir es que fue muy
bonito mientras duró y que estoy agradecida por el tiempo en que se dio este
hermoso sentimiento entre nosotros. Bueno,
ya es hora de marcharnos....y que cada cual continúe viviendo su historia como
lo hacíamos antes de conocernos....y que podamos ser felices....por caminos
separados....
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