En la vida
hay todo tipo de momentos: unos te hacen
derramar lágrimas mientras que otros simplemente te sacan una hermosa
sonrisa. Todos los sentimientos quedan
expuestos al momento de hacer historia pues de esta manera vemos cómo nuestro
corazón reacciona ante la adversidad que se nos presenta. Hoy me tocó el lado sensible del amor: extrañar al ser que más amo en este mundo.
Mi vida,
cada día te extraño un poco más, es algo que mi corazón no te puede
ocultar. Con tan sólo mencionar tu
nombre mi mirada irradia al instante una brillante luz que nadie es capaz de
quitarme de encima. Mis labios echan de
menos ese dulce contacto que tienen con los tuyos. Esas suaves caricias que me das ya no las
siento en mi cuerpo pues el viento se las ha llevado sin decirme la hora de su
regreso. Hasta mi respiración ha
cambiado pues me hace falta el aire a cada momento de tu ausencia. Mi corazón late con una intensidad diferente
pues parte de esos latidos se fueron tras de ti para complementarte.
Las horas
sin ti resultan ser una eternidad. Me
quedo mirando tu retrato como si pasaran horas cuando en realidad el tiempo
sólo ha corrido un poco. Por un minuto
que no sepa de ti mi corazón ya empieza a clamarte a gritos. Mi manera de extrañarte no es nada fácil pues
mi mente y mi corazón padecen profundamente este sentimiento y ansían con que
llegue ese día para por fin volverte a ver.
Mientras esto sucede busco la manera de mantenerme ocupada pero sin
dejar de pensar de ti. Me siento a
meditar y la lluvia de recuerdos brota de mi mente inyectando vibrantes colores
a mis alrededores. Al recordarte me
transporto a esos momentos para vivírmelos con la misma intensidad con la cual
se dieron. Cómo olvidar esa divertida
carcajada que hacía ruido sin cesar o hasta esa proposición seria que me puso a
temblar en muchas ocasiones. Son tantas
las memorias que salen a relucir que mi mente reproduce a cada instante la
película de nuestro amor. Hasta mis
letras te extrañan demasiado pues a tu lado ellas toman una versatilidad
increíble que me enamoran. Estas
palabras que estoy redactando tienen un mejor sentido porque cada una de ellas
fue pensada en ti y vienen directamente desde el fondo de mi apasionado corazón.
El
extrañarte no sólo se limita a mis días pues debo confesar que en las noches es
cuando mis pensamientos se activan con gran intensidad. Hay ocasiones en que me desvelo pensando en
ti. Dejo que la mente vuele mientras
sueño despierta. Imagino que estas a mi
lado y que juntos estamos creando historias que quedarán escritas en nuestro
libro de vida. Así me la paso hasta que
caigo profundamente dormida. No puedo
dejar de lado que mis sueños te reclaman a cada noche porque cada aventura
vivida a tu lado se convierte en toda una diversión. En cada esquina, en cada plática, en cada
canción o en cada letra allí estás tú mi amor diciendo presente.
Nunca pensé
que podría extrañar a alguien con tanta intensidad como me pasa contigo. Echaré de menos a muchas personas que se han
marchado de mi vida pero en definitiva el sentimiento de extrañarte no se
compara en nada con el de ellos.
Extrañarte es sentir ese pequeño vacío en el corazón que sólo tu
presencia y tu amor pueden llenar. Es un
dolor bonito pues no provoca ningún daño ya que se valora en gran medida esa
ausencia y a la vez se aprende amar a ese ser cada día más con una intensidad
extrema. Extrañar traspasa fronteras
pues parte de este sentimiento sale de mi corazón para alojarse en el tuyo y
así mantener vivos la llama de este amor.
Extrañarte es desear vernos a cada instante aun cuando no sea
posible. En palabras más sencillas es
extrañarte con todo el corazón. Extrañar
de esta manera es equivalente a una sola cosa:
amor del bueno.
Ay mi amor
cuánta falta me haces pero mediante estas letras te siento muy cerca. Extraño todo de ti....todo. Espero que al leer estas letras te lleguen tan
profundo que hasta puedas sentir que estoy frente a ti expresándotelas con el
corazón en la mano. Te Amo Mucho Mi
Vida.
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