En algún
momento de nuestras vidas siempre recordaremos a ese viejo amor que alguna vez
nos hizo feliz….quizás las cosas no hayan terminado bien pero de esa relación
debemos recordar lo bonito que hubo….todos hemos tenido que pasar por esta
etapa y a pesar de que al principio fue difícil sanar las heridas, ya con el
tiempo el dolor desapareció y solo quedaron en nuestras mentes esos recuerdos
positivos vividos junto a él/ella….
Un viejo
amor siempre deja una huella imborrable en nuestro corazón….por más que
queremos olvidar siempre la mente hará un espacio para hacernos recordar
aquellos momentos del pasado en el cual lo único que existía era la felicidad
junto a esa persona que amábamos con todo nuestro ser….
Recordar lo
mucho que lo/la amábamos es símbolo de que el corazón en ese entonces encontró
a ese alguien que le motivó a latir con más fuerzas…. a esa alma gemela que
pensábamos que era la correcta….a esa persona en la cual pusimos toda nuestra
confianza porque en ese momento el corazón sentía que era la ideal para
hacernos feliz….
Con decir
viejo amor lo expresamos todo: un amor
del pasado que en ese instante nos hizo vibrar de pasión, a amar con locura y
vivir al máximo del momento como si él/ella fuese la única persona en el mundo sin
saber que el tiempo nos mostraría lo contrario…. un amor que fue lo mejor que
nos pudo haber pasado en ese momento….un amor que quizás no fue del todo perfecto
pero en el que sí se vivieron gratos momentos de felicidad….momentos de los cuales
no debemos arrepentirnos porque en ese instante era lo que más disfrutábamos….un
amor del cual recibimos lecciones de vida que jamás se deben olvidar….lecciones
que nos hacen cada día más sabios y fuertes….un amor que debemos dejar en el
pasado para que no nos afecte en nuestro presente….un amor que cuando la mente
nos lo recuerde simplemente podamos sonreír por habernos dado felicidad en esa
etapa de la vida….
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