Hoy es un día en el cual los recuerdos se hicieron sentir de una manera profunda en mi mente. Cómo olvidar aquéllos momentos que vivimos juntos pues de ellos siempre existía una historia que contar. No sólo recuerdo hoy el significado de cada uno de esos días pues debo añadir que en ellos había también un trasfondo especial. Detrás de cada momento ambos teníamos esa conexión única que nos unía en una sola alma la cual se entregaba al amor con gran pasión. Era una conexión que iba más allá de lo físico, de los sentimientos sentidos y de las palabras expresadas. Era todo un acontecimiento mágico con un valor interminable que con tan sólo vivirlo dejábamos al descubierto todo el amor que existía entre nosotros.
Recordar
esto en un día como hoy me llena el corazón de melancolía pues ya tú no estás
aquí para poder vivir esta conexión en todo su esplendor. Los sentimientos de alegría y tristeza se
encuentran y chocan entre sí para juntos formar ese remolino de emociones que
me tiene en altas y bajas durante todo el día.
Sé que las lágrimas quieren hacer una enorme fiesta pero estoy
consciente que con ellas no voy a hacer que regreses a mi lado. Simplemente sonrío pues para mí esos momentos
fueron los más grandes. La felicidad que
se manifestaba en ti también se reflejaba en mí y eso provocaba que la conexión
entre nosotros fuese más fuerte a cada rato. Debo confesar que es un detalle que aún tengo
presente aunque ya no vuelvas a mi lado.
A decir verdad esa conexión única fue de los mejores instantes que pude
vivir pues me olvidaba del mundo entero y ponía todas mis energías en ti para
gozar a tu lado de todo ese tiempo que ahora sólo son memorias que un corazón
enamorado nunca olvidará.
A pesar de
lo sucedido estos instantes de ensueño son los que van a seguir latentes en mi
corazón. El tiempo podrá pasar y allí
van a permanecer vivos como símbolo de todo ese amor que algún día te tuve. Seguirán siendo las piezas del rompecabezas
que se empezó a armar pero que nunca se pudo completar. Esa conexión única seguirá viva en mi mente
porque mediante ella podré recordar todos los momentos de grata felicidad y
amor que tuve junto a ti. Gracias por
permitirme descubrirla.
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